Mi camino hoy es nuevamente frío, lento, llano!,

mis impulsos dejaron su candor, su alegría,
cada brote de mi corazón, huerfana claveria,
Ayer latír era algarabía, hoy ausculto y no, ya no!

Las bellas melodías se tornan lugubres, dolorosas,
El Sol sale sin poderlo compartir,
nadie hay en mi asoleadero
esta es una paz sórdida, de estancias escabrosas.

Ha muerto el amor que embelecía,
en el corazón de mi amada, torba osadía!
Hoy es una relación, desolada, acre, fría.
Como conciliarle a legitima razón a esta amada mía?

Pero en el escombrozo corazón,
hay una diminuta y potenciada valoración,
porque allí asoma íntegra la conciencia,
y sobre su inocencia, llergue en mí la compasión.

Troco mi pesar en calmo y metamorfico proceso,
puedo amar con equidad !, es evidente!
es esa paz, el impulso que a mi corazón y mente,
ayer en retroceso, dara un refrescante y álgido progreso.
 
 
Gerardo Ramírez Arredondo (arbolg@hotmail.com)