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X Dedicatoria
[1]
[Que] por las virtudes acumuladas al componer
este texto, «La entrada en las prácticas del Bodhisattva»,
puedan todos los seres, igualmente,
involucrarse en esas prácticas.
[2]
[Que,] en todas las direcciones, puedan todos los seres
que sufren en su cuerpo y su espíritu,
obtener océanos de gozo y de dicha,
por los méritos que he creado así.
[3]
[Que] en tanto dure la existencia cíclica,
la dicha de los seres nunca mengüe;
que accedan, sin interrupción,
a la felicidad insuperable de un bodhisattva.
[4]
[Que] puedan todos los seres encarnados
que, en toda parte en el universo
padecen los sufrimientos de los infiernos,
probar la sublime dicha de Sukhavati.
[5]
Que aquellos ateridos por el frío encuentren el calor,
y que, por los oleajes de agua vertidos sin cesar
por las nubes de compasión de los Bodhisattvas,
sean refrescados los seres quemados por el calor.
[6]
[Que] pueda el bosque de hojas cortantes
devenir en un bosquecillo encantador;
y que puedan los árboles de cuchillos y espadas
devenir en árboles para colmar los anhelos.
[7]
Que las tierras de los infiernos se vuelvan
regiones dichosas, de grandes lagos perfumados
por los lotos y embellecidos con los melodiosos cantos
de los patos, las ocas y los cisnes salvajes
[8]
Que los carbones incandescentes se transformen en gemas,
que el piso de hierro candente devenga en un
empavesado de cristal,
y las montañas de los infiernos triturantes devengan
en celestiales lugares de culto, poblados por Sugatas.
[9]
[Que] puedan las lluvias de lava, piedras quemantes y armas,
a partir de ahora, devenir en lluvias de flores,
y [que] puedan, aquellos que se pelean con sus armas,
jugar, desde ahora, a la guerra de flores.
[10]
Que aquellos que se ahogan en el río de ácido quemante,
con su carne hendida, [con] sus huesos blancos como el lis,
obtengan un cuerpo divino por el poder de mis virtudes,
y moren entre las diosas en un apacible río.
[11]
«-¿Qué temen los hombres de Yama,
los halcones y buitres insoportables?
¿De quién nos viene esta noble fuerza [que] aclara
las negras tinieblas y nos aporta el gozo?-».
[Que] al mirar a lo alto, en los cielos, perciban
la radiante forma de Vajrapani;
Que su gozo, potente, los libere del mal,
y que moren en su presencia.
[12]
[Que,] cuando vean las incandescentes lavas infiernales
[ser] apagadas por una lluvia de flores mezclada con agua perfumada,
instantáneamente satisfechos, busquen la razón...
[Que] puedan todos los seres de los infiernos ver, así, a Padmapani.
[13]
«-Abandonad vuestros temores, amigos míos; volved rápido hacia
nosotros;
¿quién huiría, pues, cuando el joven Portador de Trenzas está ahí, apartando
nuestros miedos,
él, cuya fuerza disipa todo sufrimiento y nos aporta una gozosa energía,
el perfecto Protector de todos los seres, Bodhisattva de amoroso corazón?
[14]
Ved, un centenar de divinidades vienen a venerar
sus pies de loto con sus diademas;
una lluvia de variadas flores cae sobre su cabeza:
tiene los ojos húmedos de compasión;
su vasto y encantador palacio resuena [las] alabanzas
entonadas por milles de diosas-».
[Que,] percibiendo así a Manyugosha,
puedan los seres de los infiernos gritar de gozo.
[15]
[Que] así, tras haber podido ver, [a] part[ir d]e las raíces
de mis virtudes,
una lluvia perfumadas y refrescante caer
de[sde] gozosas nubes creadas por los Bodhisattvas
Samantabhadra y los demás, tal [como]
Sarvanivarana-viskambini,
puedan los seres de los infiernos conocer un real gozo.
[16]
[Que] puedan todos los animales ser liberados del miedo
de comerse unos a otros;
[que] puedan los espíritus ávidos ser tan felices
como los habitantes del continente norteño.
[17]
[Que] por el incesante flujo de leche que cae
de las manos del arya Avalokiteshvara
los espíritus ávidos sean satisfechos,
y que, por bañarse en él, sean por siempre refrescados.
[18]
Que los ciegos vean las formas,
que los sordos escuchen los sonidos,
y que todas las mujeres encintas,
como Mayadevi, den a luz sin dolor.
[19]
Que aquellos que están desnudos sean vestidos,
que aquellos que tienen hambre sean alimentados;
que los sedientos puedan encontar
agua pura y deliciosas bebidas.
[20]
Que los indigentes encuentren riquezas,
y que aquellos postrados por el pesar vuelvan a encontrar el gozo;
que los desesperados vuelvan a encontrar la esperanza,
la estabilidad y una prosperidad perfecta.
[21]
Que todos los enfermos, tantos como sean,
rápidamente de su mal liberados sean,
y que los seres no conozcan
[ya]
más ninguna enfermedad.
[22]
Que los temerosos estén sin miedo siempre;
que los encadenados sean liberados.
Que los débiles vuelvan a encontrar la fuerza,
[que] puedan los seres hacerse amigos.
[23]
Que la dicha venga a todos los viajeros,
en todas las direcciones que recorran;
cualquiera que sea la meta de su viaje,
que se cumpla sin esfuerzo alguno.
[24]
Que aquellos que navegan
obtengan lo que habían ido a buscar;
[que], regresados sanos y salvos, puedan tener
el gozo de volverse a encontrar a sus amigos y su familia.
[25]
Que todos los viajeros perdidos
encuentren compañeros de camino:
que su ruta sea fácil y sin fatiga,
sin temer tigres ni bandoleros.
[26]
Que aquellos errantes en los lugares desiertos o peligrosos,
los niños, los ancianos, los desprovistos de protector,
los minusválidos y los alienados,
sean protegidos por los seres divinos.
[27]
Que los seres sean librados de los ocho estados sin libertad;
que conozcan la fe, la sabiduría y el amor. Que tengan alimento y una excelente conducta, y que recuerden todas sus vidas.
[28]
Que tengan todos riquezas ilimitadas como las de la «mina de los tesoros del espacio». [que] puedan disponer de ellas libremente, sin disputas ni violencia.
[29]
Que los seres desprovistos de esplendor se vuelvan resplandecientes; que aquellos cuyo cuerpo está gastado por las pruebas vuelvan a encontrar un cuerpo perfecto, brilloso de salud.
[30]
Que las mujeres de este mundo, tantas como sean, tengan un renacimiento masculino. Que aquellos de modesto origen obtengan la grandeza, y que los orgullosos sean hechos humildes.
[31]
[Que] por los méritos que he acumulado aquí, puedan todos los seres, sin excepción, abandonar las fechorías y practicar siempre el bien.
[32]
Que no sean jamás apartados del espíritu de Despertar,
pero que sigan la práctica de los bodhisattvas;
que sean perfectamente guiados por los Budas,
y que abandonen las obras de los maras.
[33]
Que todos los seres puedan tener
una duración de vida incommensurable.
Que puedan, siempre, vivir dichosos,
sin siquiera escuchar la palabra "morir".
[34]
Que en todos los rincones swl universo
haya parques con árboles que atienden los anhelos,
llenos del delicioso canto del Dharma
enseñado por los Budas y los Bodhisattvas.
[35]
[Que] la tierra pueda ser, en todo lugar,
pura y sin asperezas,
llana como la palma de la mano,
lisa por naturaleza, como el lapislázuli.
[36]
[Que] puedan cortejos,
formas de numerosos bodhisattvas
embellecer la tierra
con sus excelentes cualidades.
[37]
Que el sonido del Dharma, que resuena en el canto
de las aves, en el rumor de los árboles,
en los rayos de luz, e incluso en el espacio,
sea escuchado, sin cesar, por todos los seres (encarnados).
[38]
[Que] puedan siempre encontrarse
[con] los Budas y los Bodhisattvas;
[que] puedan los Maestros de este mundo ser venerados
con immensas nubes de ofrendas.
[39]
[Que] por la gracia de los dioses pueda caer la lluvia
en el momento oportuno; [que] pueda ser abundante la cosecha.
[Que] los reyes puedan actuar según el Dharma,
y los habitantes del mundo prosperar.
[40]
Que todos los medicamentos sean potentes;
que la recitación de mantra sea eficaz;
que las dakinis y los caníbales y demás,
tengan un espíritu compasivo.
[41]
Que ningún ser conozca
el sufrimiento, ni el miedo;
que no conozcan el desprecio.
Que no sean desdichados jamás.
[42]
[Que] en todos los templos, pueda la lectura de los textos
y la recitación, prosperar y permanecer.
[que] la comunidad monástica pueda ser armoniosa,
y [que] pueda cumplir sus metas.
[43]
Que todos los monjes plenamente ordenados
que deseen practicar, encuentren un lugar solitario;
y [que], liberados de toda distracción mental,
mediten allí, con suavidad de espíritu.
[44]
Que las monjas plenamente ordenadas no carezcan de nada.
Que no se querellen y no sufran violencia alguna.
Así, que la comunidad monástica
no deje jamás degenerar la ética.
[45]
Que aquellos que han transgredido la ética lo lamenten,
y que borren todas sus fechorías.
[Que] obtengan renacimientos dichosos,
y que tampoco allí degenere su disciplina.
[46]
Que los eruditos puedan recibir
marcas de honor y ofrendas;
que su espíritu esté completamente puro
y que sean conocidos en todas las direcciones.
[47]
Que no padezcan jamás los sufrimientos
de los reinos inferiores, ni ninguna dificultad;
y que, con un cuerpo superior al de un dios,
alcancen, rápidamente, la Budeidad.
[48]
[Que] puedan los seres hacer ofrendas
a todos los Budas, una y otra vez.
[Que] puedan tener la dicha de probar, siempre,
la inconcebible felicidad de los Budas.
[49]
Que los Bodhisattvas puedan cumplir
el bien de los migrantes, según sus anhelos.
Que los seres puedan recibir
todo lo que los Protectores les destinan.
[50]
Que todos los realizadores solitarios
y los oyentes, alcancen, igualmente, la dicha.
[51]
[Que] por la gracia de Manyugosha,
hasta que alcance la «Tierra Muy Gozosa»,
recuerde todas mis vidas,
y que sea, siempre, ordenado [monje].
[52]
[Que] pueda vivir, simplemente,
de alimento frugal.
[Que] en todas mis vidas, pueda obtener
perfectas moradas solitarias.
[53]
[Que] cuando tenga gana de estudiar las Escrituras,
o de hacer la [más] mínima pregunta,
pueda ver, sin obstrucción,
al Protector Manyughosa mismo. [54]
[Que] con el fin de obrar por el bien de los seres
que ocupan hasta los linderos del espacio,
pueda mi conducta parecerse
a la de Manyughosa.
[55]
Por tan largo tiempo como permanezca el espacio,
y por tan largo tiempo como permanezcan los seres,
[que] permanezca, también yo,
para eliminar su sufrimiento.
[56]
Cualquiera que sea el sufrimiento de los seres,
que sea en mí que madure.
Que, todos los seres prueben la dicha,
por el poder de la asamblea de los Bodhisattvas.
[57]
Que aquella que es es el único remedio para los males de los seres,
la fuente profunda de toda dicha:
la Doctrina, reciba homenajes y riquezas
y que pueda permanecer largo tiempo.
[58]
Rindo homenaje a Manyughosa,
por cuya gracia tengo un espíritu virtuoso.
Rindo, igualmente, homenaje a mi Maestro espiritual,
por cuya gracia me desarrollo.
Así acaba el texto llamado Bodhisattvacharyavatara,
compuesto por el gran Maestro Shantideva.
Fuente: http://sambodhi.iespana.es/
Hermosísimo, ¡gracias!
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