lo desconocido se hace conocido en el momento en que lo reconocemos |
¿Niego cuando, al afeitarme, recuerdo mi maravillosa estancia en Suiza?
¿Niega uno el recuerdo de momentos placenteros?
¿Se da uno cuenta de ello y lo niego?
No es dramático ni espectacular, nadie va a saber de ello; sin embargo, el constante negar las pequeñas cosas, esos borrones constantes, ese eliminar cositas y no solo las cosas grandes, es esencial. Es fundamental negar el pensamiento como recuerdo, sea placentero o no, en cada momento del día y en el momento en que surje. Uno lo hace sin motivo, y no con el fin de alcanzar ese extraordinario estado de lo no conocido.
Vive en Rishi Valley y piensa en Bombay o en Roma. Eso crea conflicto, embota la mente, la divide.
¿Puede observar eso y terminar con ello?
¿Puede seguir eliminando cosas sin el deseo de entrar en lo desconocido.?,
Nunca puede experimentar lo desconocido porque en el momento en que lo reconoce como desconocido, ya está de nuevo en lo conocido. El proceso de reconocer es un proceso de contínuo conocimiento. Como no sé lo que es lo desconocido, solo puedo hacer una cosa, eliminar el pensamiento a medida que surje. Ve esa flor, la siente, capta su belleza, su intensidad y su brillo extraordinario. Luego va a la habitación donde vive, la cual no está bien proporcionada, es fea. Vive en esa habitación pero tiene cierto sentido de la belleza y empieza a pensar en la flor. Entonces se da cuenta de ese pensamiento en el momento en que surje y lo elimina. Ahora bien, ¿desde qué profundidad elimina, desde qué profundidad niega la flor, su esposa, su vida económica? Tiene que vivir con su esposa, sus hijos en esta horrible y monstruosa sociedad. No puede retirarse de la vida. Pero cuando niega totalmente el pensamiento, el dolor, el placer, su relación es diferente; de modo que la negación tiene que ser total, no parcial, no se trata de mantener las cosas que nos gustan y descartar las que no nos gustan.
- Krishnamurti, Krishnamurti Sobre educación, Diálogos con profesores, Capítulo 4, las Obras Completas.
buen año |
No hay comentarios:
Publicar un comentario