Los peces nacen en el agua, el hombre nace en el Tao.Si los peces, nacidos en el agua, buscan la sombra profunda del estanque o la alberca, todas sus necesidades son satisfechas.Si el hombre, nacido en el Tao, se hunde en la profunda sombra de la no-acción, para olvidar la agresión y las preocupaciones, no le falta nada, su vida es segura.
Moraleja: "Todo lo que necesita el pez es perderse en el agua.Todo lo que necesita el hombre es perderse en el Tao".

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queridos amigos los haikus que humildemente escribo están en este sitio: www.haikusilvestre.wordpress.com
gracias ! Namasté

24 abr 2010

la felicidad en la otra vertiente de la muerte




Chuang-tzu se dirigia al reino Ch'u. Vió una calavera descarnada monda y lironda. Con su látigo le dió unos golpecitos y le preguntó cuál había sido la causa de su muerte, ruina de su nación, suicidio por no soportar el deshonor, frío o hambre. Despues la tomó y, haciendo de ella amohada, se duerme. En sueños se le aparece el difunto. Chuang-tzu le pregunta si volvería con gusto a la vida si así lo dispusiera el Señor de los destinos. La calavera le contesta que de ninguna manera dejaría su dicha para volver al mundo. "Después de la muerte no hay rey arriba ni súbdito abajo. No hay estaciones. Del Cielo y de la Tierra hacemos tranquilamente nuestro tiempo. Ni un rey en posiciòn de su trono nos puede igualar en felicidad".

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