Dhu-l Nun (que su alma sea santificada) iba un día de peregrinaje; cuando vio un perro tan sediento que estaba lamiendo las rocas del desierto.
Como no llevaba agua, llamó a los que viajaban con él y les dijo:
"He hecho setenta peregrinaciones, daré la recompensa de todas ellas a cualquiera que le dé agua a ese pobre perro".
El santo estaba dispuesto a dar sus setenta peregrinaciones, para conseguir agua para un perro.
Imagina el valor que tendría satisfacer la sed de un ser humano.
escuchando silencios ... pretendidos haikus ... nacen desde la floresta ...
Los peces nacen en el agua, el hombre nace en el Tao.Si los peces, nacidos en el agua, buscan la sombra profunda del estanque o la alberca, todas sus necesidades son satisfechas.Si el hombre, nacido en el Tao, se hunde en la profunda sombra de la no-acción, para olvidar la agresión y las preocupaciones, no le falta nada, su vida es segura.
Moraleja: "Todo lo que necesita el pez es perderse en el agua.Todo lo que necesita el hombre es perderse en el Tao".
Moraleja: "Todo lo que necesita el pez es perderse en el agua.Todo lo que necesita el hombre es perderse en el Tao".
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