escuchando silencios ... pretendidos haikus ... nacen desde la floresta ...
Los peces nacen en el agua, el hombre nace en el Tao.Si los peces, nacidos en el agua, buscan la sombra profunda del estanque o la alberca, todas sus necesidades son satisfechas.Si el hombre, nacido en el Tao, se hunde en la profunda sombra de la no-acción, para olvidar la agresión y las preocupaciones, no le falta nada, su vida es segura.
Moraleja: "Todo lo que necesita el pez es perderse en el agua.Todo lo que necesita el hombre es perderse en el Tao".
Moraleja: "Todo lo que necesita el pez es perderse en el agua.Todo lo que necesita el hombre es perderse en el Tao".
20 ene 2013
Sólo Luz
Del 20 al 26 de enero de 2013
Hay una energía disponible en el cosmos durante esta semana que puede ayudarnos a superar nuestros desafíos. Esta semana marca el momento en la historia en el cual Los 72 Nombres de Dios fueron revelados al mundo. Esta fue la herramienta metafísica utilizada por los israelitas para acceder a la energía espiritual para abrir el Mar Rojo. En Kabbalah aprendemos que meditar en Los 72 Nombres de Dios puede asistirnos no sólo a descubrir nuestro propio Mar Rojo (los obstáculos que enfrentamos en la actualidad) sino también a superarlos.
Sin embargo, existe un prerrequisito para conectar con esta energía tan especial que ahora está disponible para nosotros, y es saber que a pesar de cualquier desafío que estemos enfrentando, en tan sólo un segundo la oscuridad puede desaparecer.
Ver lo malo está bien. Creer que lo malo permanecerá no lo está.
A veces perdemos la motivación para hacer nuestro trabajo espiritual. Eso está bien. A veces incluso perdemos el deseo de cambiar. Eso también está bien. Lo único que no está bien es no estar conscientes de que todo puede cambiar.
Cuando atraes la Luz para aguantar, la oscuridad desaparece. Simplemente no puede existir más. Para activar la energía disponible dentro de Los 72 Nombres de Dios, necesitamos tener certeza en que sin importar la negatividad que vemos ahora y que sin importar cuán abrumadores sean los desafíos que enfrentamos, algún día no existirán más y sólo habrá Luz.
No tenemos que saber cómo. Sólo necesitamos saber que todo estará bien.
Entonces podemos hacer nuestro trabajo espiritual. Entonces podemos recibir la energía que está disponible para nosotros. Entonces podemos comenzar a comprometernos en el proceso de cambio.
Este entendimiento puede también proveernos un cambio en cómo percibimos nuestro trabajo espiritual. Ya sea compartir, meditar, salir de nuestra zona de comodidad o estudiar, no hacemos nuestro trabajo espiritual para lidiar con la vida. Ni siquiera lo hacemos por ser buenos. Hacemos nuestro trabajo espiritual porque tenemos certeza en que nos guiará al lugar en el que los obstáculos delante de nosotros dejarán de existir.
Sin importar dónde haya oscuridad en nuestras vidas, habrá Luz.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario